Muchas veces pensamos que el mal posicionamiento de los dientes (maloclusión dentaria) es solo una cuestión de estética, sin embargo esta patología puede derivar en diversos problemas, que afectan no solo a la boca y a los dientes.
El mal posicionamiento de las piezas dentales implica una dificultad añadida para la correcta limpieza e higiene de los mismos, lo que a menudo deriva en futuras caries y problemas gingivales. Además las maloclusiones también pueden afectar de forma severa a la articulación temporomandibular causando dolores, bloqueos de movimiento e incluso alteraciones en la masticación que derivarían en problemas digestivos.
Un estudio profundo por parte de un odontólogo especializado en ortodoncia puede indicarnos si nuestro caso concreto puede derivar en patologías más severas como estas.
Por ejemplo, en caso de apiñamiento dentario moderado y severo, es muy aconsejable para evitar problemas insistir en la limpieza de esas piezas que se superponen o apiñan, no solo con el cepillado de los mismos sino también utilizando la seda dental para eliminar aquellos restos de comida que puedan haber quedado entre ellos. Usar un colutorio adecuado mejora la higiene y previene dolencias.
Está especialmente indicado en pacientes con esta patología que se hagan una revisión cada seis meses y una limpieza en el odontólogo al menos una vez al año.
La edad es un factor clave para poder prevenir y/o corregir cualquier patología, por lo que se aconseja la revisión por un odontopediatra a partir de los dos años (cuando ya se ha completado la dentición de leche), y por un ortodoncista a partir de los seis años (cuando empiezan a salir las piezas definitivas) para vigilar cómo empiezan a ocluir esas piezas. No obstante hoy en día existen soluciones para corregir las maloclusiones a cualquier edad.
En la clínica dental García Vega la Doctora Blanca García, odontologa especialista en Ortodoncia y Odontopediatra, estará encantada de resolver todas tus dudas y te ofrecerá una solución a tu problema.